El Bar Dadá es uno de esos bares que NO enamoran a primera vista. Mi primera impresión cuando lo ví fue la de un lugar casi estridente, rozando la excentricidad. Sin embargo, es ahí donde radica su encanto. Junto a esta figura de Michael Jordan de estilo cordobés también conviven otra de la Srta. Marilyn o una de Elvis junto a un T.V. que da manga japonés. Este es uno de esos bares en los que puedes estar un par de horas solo tomando una copa y nadie te mirará pensando que no andas muy bien de la chaveta. Como esta chica, que se pegó bastante (bastante) tiempo hablando con Skype con vete tú a saber quién.
En fín, uno de esos bares... y encima ponen rocanrol...
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